Reseña. Una buena chica

Una buena chica, de Elle Kennedy

Editorial - Wonderbooks
Serie - Avalon Bay 1
Género - New adult
Puntuación ★★★★☆

Siempre lo hace todo bien. ¿Qué podría salir mal cuando vaya a la universidad? Buena hija, buena novia, buena amiga y buena empresaria: a sus veinte años, Mackenzie Cabot ya tiene un máster en cumplir expectativas. ¿Su secreto? No dejarse llevar nunca. Ni siquiera cuando una noche pierde una apuesta con un completo desconocido muy atractivo y, como consecuencia, empieza a pasar tiempo con él. Cooper vive en la ciudad universitaria de Avalon Bay, pero él no estudia: se gana la vida trabajando de sol a sol y hace horas extras en un bar nocturno. Acaba de ganar una apuesta con una universitaria y, aunque para todo el mundo Mac es la chica perfecta, para él no es más que la novia del niño pijo por el que ha perdido su empleo: la oportunidad de vengarse por todo lo alto.

 

Opinión personal🖉

Los libros de Elle Kennedy, siempre son una opción recomendada. La sencillez romántica que trasladan, hace que sus historias de amor sean realmente atractivas, ofertando esa trama que, bien sabe, ganarse la buena opinión del lector. En esta ocasión, la sinopsis de esta nueva novela, aunque acostumbrada, logra llamar la atención y convertirse así, en esa apuesta fiable de entretenimiento.

Una buena chica, es un libro que se rodea de todos aquellos elementos que mejor definen el género del new adult. Su trama principal, no se aleja de las argumentaciones tradicionales y acostumbradas, pero el característico estilo de la autora, embellece una historia de por sí, atractiva. Con cada capítulo, el lector se ve arrastrado hacia una trama dotada de un romance que va más allá del habitual relato romántico, su objetivo principal es enamorar y para ello, oferta una historia argumentada con un correcto y creíble crecimiento personal y una evolución romántica natural y realista que, no puede, ni debe pasar desapercibida. Sus páginas, reflejan con sencillez un enamoramiento realmente colorido, dotado de una argumentación que bien pudiera catalogarse como completa, una venganza, personajes de mundos contrapuesto y una sensualidad perfectamente integrada en el relato, son elementos literarios que cautivan sin esfuerzo y convencen que, su lectura es puramente recomendada.

Los personajes que copan la atención del lector, se hallan bien construidos, dotados de una fluidez que es algo más que la mera invitación a leer con entusiasmo. Su dotación especialmente armoniosa, de acuerdo con aquellos sentimientos que van floreciendo entre los protagonistas, embellece esa trama cargada de sencillez y también de una complejidad bien medida, cuya combinación resulta verdaderamente agradable. Lo cierto, es que las personalidades de todos ellos, logran de alguna manera atrapar al lector, basándose para ello, en esa evolución citada, argumentada con corrección y detenimiento, haciendo especial hincapié en aquellos aspectos que mejor definen este tipo de literatura. El constante cambio de perspectiva entre protagonistas, también logra componer una grata y positiva opinión, dando así la oportunidad de conocerlos y acercarnos a aquel relato que poco a poco componen.

El estilo de Elle Kennedy, aun conociéndolo con anterioridad, no deja de sorprender al lector. Su elegancia entremezclada con la sensualidad de un relato adulto, logra crear un paisaje literario con el que es fácil conectar y caer rendido. La burbuja que crea a su alrededor sin duda alguna, propicia comodidad y también una naturalidad que atrapa y convence. Su estilo medido y delicado, pone énfasis en el detalle de cada escena descrita, logrando así un realismo evocador. Esta autora, siempre es sinónimo de entretenimiento, de un romance cargado de sencillez, pero también fiel reflejo de aquellos elementos más característicos de la novela romántica. Las pequeñas pinceladas de complejidad, no se pierden entre un sinfín de giros argumentales, sino que su objetivo es siempre directo, conduciendo así al lector hacia la meta final de hacer de él un espectador excepcional de un romance rodeado de una sensibilidad especial.

Su ritmo por otra parte, obliga al lector a leer con el entusiasmo que, sin duda alguna, genera un crecimiento romántico que no se desarrolla ni con lentitud, ni con excesiva velocidad. Las circunstancias personales de ambos personajes principales, son la invitación perfecta para devorar cada palabra escrita, es normal sentirse arrastrado a sus capítulos orientados a enamorar y generar a su paso la grata opinión expresada. Su evolución marcada, viene de la mano de una construcción de emociones acorde con un crecimiento personal altamente visible en sus capítulos, conduciendo así a un romance lo suficientemente vistoso como para resultar llamativo.

Una buena chica, es un libro perfecto para dejarse entretener. Los romances de esta autora, con frecuencia son sinónimo de recomendada lectura, su evolución medida y su estilo cargado de elegancia y detallismo, aportan esa oportunidad anhelada de historia de amor a la altura de cualquier expectativa. Sus personajes por otra, parte, suman atractivo a su propia historia, dotando de perfección a este relato cuyo objetivo es siempre sorprender.