Reseña. Mi gran boda millonaria

Mi gran boda millonaria, Katy Evans

Editorial – Chic
Género – Romántica actual, adulta
Puntuación ★★★★★

Era un matrimonio de pega. O, al menos, esa era la idea… Nell necesita dinero para pagar su préstamo universitario y Luke para salvar su bar, así que se apuntan a un reality donde pueden ganar un millón de dólares. Las reglas son sencillas: deberán casarse, aunque no se conozcan de nada, y competir contra otras parejas en retos por todo el país. Ah, y está prohibido enamorarse. Parece fácil, Nell y Luke no podrían ser más diferentes, pero ¿podrán respetar las reglas?

 

Opinión personal

Lo cierto, es que uno tiene muy claro que, tras leer su sinopsis, éste sería un libro que se convertiría en nuestra nueva lectura. Su argumentación dinámica y profundamente entretenida, se transforma de inmediato en una promesa única de divertimento, para un lector siempre ansioso de encontrar pequeñas joyas que nos emocionen y que nos ofrezcan esa oportunidad única y diferente. Con ello, se nos presenta la oportunidad de disfrutar de nuevo del estilo de una autora que ya nos es de sobra conocido, una manera de hacer literatura que ya en el pasado se convirtió en algo recomendable y necesario.

Mi gran boda millonaria, es un título que se antoja rompedor y tremendamente novedoso. Su argumentación colorida, de alguna manera, se convierte en la fiel promesa de contener una trama que trata o al menos lo intenta, de alejarse de los viejos tópicos aun cuando acude a ciertos elementos conocidos para dar forma a su propia historia. El paisaje que se plasma en esta novela, es del todo distinto, muy propicio para dar forma a un romance a la altura de las más altas expectativas. Es un libro al que acudir sin reparo por nuestra parte, libre de miedos o de temores infundados puesto que, desde su primer capítulo y página, se nos demuestra que la apuesta no puede llegar a ser mejor ni de más alta calidad. Es, en resumidas cuentas, una opción muy recomendable, con la que fácilmente se genera una óptima opinión e impresión.

Como bien se ha apuntado anteriormente, Katy Evans ya es una vieja conocida para el lector asiduo a este determinado género y temática. Las tramas hasta el momento ideadas, siempre han conseguido mantener expectante al lector y, en esta ocasión no es diferente. Uno no puede dejar de leer con desespero, bucear en esta historia de realitys y de amores que simplemente prenden la llama no desde el primer momento, sino que cuentan con su particular compás. Dotado de un ritmo álgido con cada página, se ha dado forma a un romance en el que se entremezclan el más puro sentimentalismo y esa sensualidad tan acostumbrada. La frescura de su relato, logra que uno avance con la determinación propia de una novela que te atrapa y que te emociona. Con un trazo elegante, cargado incluso se sencillez, se conforma una historia de amor que, no hace que nuestro corazón se encoja del todo, pero sí que nos erice la piel. Es, por tanto, un libro único que perfectamente se relaciona con sus compañeras de género, pero que a la vez también se aleja en su intención de ofrecer algo que resulte del todo novedoso.

Katy Evans, hace su magia creando una burbuja que te mantiene absorto. De nuevo, se convierte en una opción de lectura inolvidable, en una recomendación ineludible y, sobre todo, en el ejemplo perfecto de que la sencillez es bonita e incluso necesaria. Este libro, a pesar de la complejidad de sus personajes o de los elementos profundamente maduros que rodea a cada uno de ellos, ha optado por la naturalidad como mayor insignia. Uno, no puede dejar de sentir esa dulce comodidad que busca, esa identificación con el paisaje, con sus protagonistas y esa sonrisa dulce que nace con cada página leída.

Resulta grato, redescubrir de nuevo la pluma literaria de su autora, rememorar aquellos porqués que justificaron que su nombre estuviera en esa lista a la que se acude cuando uno quiere volver a hacer cierta elección de lectura. Es un libro que no se rodea de altas pretensiones o de objetivos imposibles, solo trata de entretener basándose en una historia de amor llena de frescura y de vitalidad. Ese objetivo, se consigue casi desde su inicio y esa sensación se conserva hasta su última página. Mi gran boda millonaria, es una novela que ha de leerse, más cuando se pretende encontrar ese entretenimiento dulce, exento de grandes complejidades.