Sean Cote no tiene límites, de Iris T. Hernández
Serie – Sean Cote 3
Editorial – Planeta
Género – Romántica adulta
Puntuación ★★★☆☆
No creas que para llegar hasta aquí el camino ha sido fácil. Hemos tenido que sortear demasiados baches, y no me siento orgullosa de cuanto he hecho. Puede que si no hubiera actuado de forma impulsiva hubiese evitado consecuencias que han cambiado el sentido de nuestra vida.
Para empezar, ese fatídico accidente. Desde el momento en que apareció el médico y nos dijo cuál era su estado, supe que nada volvería a ser igual, y yo era la única culpable de lo sucedido. Si hubiera tenido la suficiente confianza en Sean, habría hablado con él antes de huir y no le hubiese arruinado la vida. Lo convertí en algo que no era, un hombre vulnerable para sus enemigos, y ellos lo aprovecharon para destrozarnos.
Aunque nosotros tenemos algo que ellos no valoraron, y es que desde que nos conocimos, el uno sin el otro no somos nada, pero juntos lo somos todo. Aceptamos el presente y nos prometimos un nuevo futuro, uno basado en la confianza y en el espíritu de superación, eso es todo.
Opinión personal
Tras la lectura de sendas publicaciones anteriores, era
importante comenzar esta novela bajo un cambio de perspectiva que ayudase a que
la despedida de esta historia de erotismo, secretos y confusión de sentimientos
fuera lo más óptima posible. Después de unas opiniones un poco desfavorables,
era importante para mí como lectora, poder decir adiós con la sensación de
haber puesto todo mi esfuerzo en darle una opinión sincera y libre de
sensaciones previa. Este libro ha supuesto desde su inicio, en esa última
oportunidad para la reconciliación con una trama a la que me ha resultado difícil
engancharme sin embargo, puedo decir que, a modo de introducción con respecto a
su reseña, que ha significado también un entretenimiento algo más atractivo a
mis ojos.
Sean Cote no tiene límites, es el final de una
historia de subidas y bajadas, de misterios rodeados de sangre que han
mantenido en vilo a sus personajes y que ha aportado como lectora cierta dosis
de intriga. Como última entrega, su cometido, o más bien su objetivo era claro,
aportar ese final soñado o al menos esperado. He de decir que, como última
entrega, no decepciona y plasma en sus páginas aquello añorado en parte en sus
primeras entregas. Como bien he dicho al principio, ha supuesto para mí una
reconciliación con su propia historia, me ha aportado ciertamente aquellos
elementos que siempre consiguen llamar mi atención y generar esa opinión
favorable que inclina la balanza hacia la recomendación.
Este último libro, experimenta cierto cambio sustancial
en lo que respecta a la evolución de su trama y su ritmo. Es fácil sentir
esa cierta complejidad de la que se ha dotado a la historia o más bien madurez.
El romance entre ambos protagonistas ya no está narrado desde ese prisma
sencillo y a veces insulso representativo en ocasiones del género de la erótica más purista, la
evolución de ambos está marcada desde el dolor y es desde ahí donde deben dar
rienda suelta a su evolución. En cierta manera, me ha dado la sensación de
haber apostado por un libro totalmente distinto, si lo comparamos con sus dos
primeras novelas. Apostar por esta historia, aporta cierto resultado óptimo que
te hace tener la sensación de haber elegido bien con respecto a sus tres
libros.
Sean Cote, pretende con esta novela provocar ciertos
suspiros soñadores a sus lectores. Demostrar que historias de tal corte pueden
guardar tras de sí esa madurez y complejidad capaz de ganarse nuestras más
absolutas recomendaciones. Con respecto a la pluma de la autora debo decir que
aporta continuidad, su pluma cuenta con los mismos elementos que bien define su
estilo. La elegancia, la sencillez y su más que óptima descripción de escenas,
se envuelve esta vez en un romance a la altura de las expectativas, con una
evolución muy trabajada y cuya forma es realmente atractiva. Bajo un ritmo
ágil, se motiva la lectura hasta su mismo final, un final además que cuenta con todos aquellos elementos siempre esperados por el lector y un epílogo que nos ayuda a decir adiós de la mejor manera.
Este último libro me ha servido para alegrarme de manera
personal en mi empeño por seguir leyendo esta historia que tan malo resultado
coseché en sus inicios. Sean Cote me ha acompañado durante unas semanas de
lectura y, echando la vista atrás puedo decir ahora que ha sido grato conocer
su historia, ser partícipe de su romance algo complicado y difícil. En resumen,
ha sido un libro lleno de altibajos, de sensaciones contrapuestas que ha
mantenido un mismo denominador común, la excelente elegancia de una autora que
convence sin esfuerzo. Iris T. Hernández se ha hecho un hueco entre mis autoras
preferidas o más bien recomendadas, a la que recurriré en un futuro espero no
muy lejano.
¡Hola! Este libro no me atrae mucho, sin embargo, no lo descarto totalmente, esperaré a bajar mi lista de pendientes y ya veremos si le doy una oportunidad. Muchas gracias por la reseña. Un abrazo ❤
ResponderEliminarAhora mismo me decanto por otro tipo de historias más históricas pero gracias por el descubrimiento.
ResponderEliminarEsta saga me llama y me echa para atrás a partes iguales. Es un tipo de historia que hace un tiempo habría disfrutado sí o sí, pero últimamente estas sagas eróticas cada vez me decepcionan más. No sé si es porque se publica más de lo mismo o por qué será... pero cada vez me dan más miedo.
ResponderEliminarNo descarto leerla, porque como te digo me llama un montón. Pero me resisto, la verdad.
Un besazo