Saga - Chestnut Springs 2
Editorial - Contraluz
Género - Romántica contemporánea
Puntuación ★★☆☆☆ (2,5)
Trabajar de niñera para el padre soltero más gruñón del mundo debería haber sido pan comido. Pero no puedo dejar de mirarlo... Y él no puede mantener sus manos lejos de mí.
Cade Eaton es trece años mayor que yo y apenas me presta atención. Hasta que una noche me meto en el jacuzzi con él y decidimos jugar a verdad o atrevimiento. A partir de ese momento, todo vale, menos la ropa.
Es todo un cascarrabias y un poco rudo, pero resulta que los rancheros fornidos y malhablados son mi debilidad. Así que, ¿cómo voy a resistirme?
Sin embargo, cuando estamos a solas, muestra un lado más tierno, y estoy empezando a darme cuenta de que su carácter de tío duro no es más que una fachada. Alguien lo convenció de que no es lo suficientemente bueno, aunque nunca me he sentido más querida que cuando estoy en sus brazos.
Puede que mi contrato diga que nuestra relación solo durará dos meses.
Pero mi corazón me dice que será para siempre
Opinión personal
Tras finalizar la lectura del anterior libro, me fue inevitable generar con él, cierto nivel de expectativa y es que el hermano mayor de la familia Eaton, debido a su agria personalidad, cuenta desde su primera descripción con un atractivo innegable. Al leer su argumento, no pude evitar reactivar esas ganas por ser testigo del romance de ambos personajes.
Siendo una segunda novela dentro de una saga, puede llegar a percibirse cierto toque de natural continuación, aunque esta puede leerse de manera totalmente independiente. Aun así, es patente, su apuesta por la sencillez y un contenido abiertamente básico, que ya define el estilo de su autora, de la misma manera, su cliché es un viejo amigo del lector. Cade y Willa, construyen mano a mano, una trama de romance salpimentado de una sensualidad que no destaca por sí misma y que no sorprende al lector y que es incluso esperable, pero que sin embargo trata de reforzar la figura de ambos personajes, puesto que éstos no pueden ser más contrapuestos y, es ahí, donde Elsie Silver destaca.
Heartless. Sin límites, es un libro cuya historia se encuadra bien el género, representando detalladamente sus elementos más identificativos, de ese modo no engaña al lector, más cuando se ha sido testigo de su anterior trama. Su autora, vuelve a mandarnos una invitación para volver al seno de la familia Eaton, esta vez para ver caer en las garras del amor a Cade, el refunfuñón. Su historia personal y pasada, son el eje vertebrador de su argumentación y, en este segundo libro, se es testigo de su faceta como padre soltero, descubriendo con ello a un Luke repleto de encanto y de una dulzura que totalmente encandila. La lucha constante de ambas personalidades, con la jovialidad y sinceridad de Willa, hace que se encarnen choques que aportan cierto carácter a su trama, dando lugar a escenas un tanto divertidas, en las que la tensión sexual cada vez es más creciente. Sin embargo, me ha faltado emotividad y una mejor definición de las emociones, lo que le lleva a no ser una lectura adictiva ciertamente.
La configuración de tan altas expectativas, creo que erróneamente, me ha llevado a configurar en mi mente una historia que luego no se ha materializado, lo que me ha hecho sentir cierto rastro de decepción con esta historia, al no colmar como esperaba esas previas sensaciones gestadas con el primero de los libros. Aunque su romance totalmente acostumbrado, puede llegar a ser definido como entretenido, no va más allá de ese básico objetivo, sin crear esa huella imborrable tan buscada. Sus treinta y seis capítulos, aunque se leen bien y parten de una base prometedora, apenas enganchan o captan por entero tu atención. Sus primeras páginas, te llevan a acariciar con los dedos esas expectativas, pero aun contando con un intercambio de perspectivas entre Cade y Willa, apenas su historia enamora y su figura como personajes principales, no alcanzan la garra esperada. Por otro lado, sus últimas páginas llegan a ser muy vertiginosas, sin prestar atención en la maduración de sus sentimientos.
Elise Silver es una autora que conecta, por lo general, muy bien con el lector, gracias a su estilo directo y sus historias románticas resolutivas. Aunque ciertamente, este libro no es lo esperado, se continúa percibiendo su toque distintivo, lo que te anima a seguir disfrutando de sus futuras traumas y no desprenderse de la promesa de ser testigo de los romances de la familia Eaton, con unos hermanos muy distintos entre sí, pero con el denominador común de ser unos cowboys modernos. Cade, dará paso a otro miembro de la familia, un tercer libro que de nuevo hará gala de la sencillez.
A pesar de estar falto de emoción y no contar con esa garra capaz de cautivar, lo cierto es que es un libro entretenido, que hace pasar un rato agradable al lector. De ritmo pausado y exento de giros argumentales rompedores, la naturalidad de su historia es su mejor baza y es ella, la que te conduce hacia un final que no destaca por su originalidad, pero que sí que llega a ser un adiós calmado y bien acogido. Como viene siendo habitual en la autora, hacia sus últimas páginas, se nos presenta la futura nueva pareja, tentándote y haciéndote soñar con el tercero de los libros.
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